La farmacéutica Elisa Suñer se introdujo en la formulación magistral nada más terminar sus estudios de la mano de la farmacia Marti Tor, que pertenecía a su suegro, Jose Marti Tor y que fundó en el año 1952. “Yo cuando acabé los estudios –comenta Suñer- empecé a trabajar en esta farmacia, y fue donde me formé en dermatología. Llevo en ella desde los inicios de mi carrera hace más de 30 años. Empecé especializándome y pude ir observando todas las necesidades que había en el arsenal terapéutico, aunque es cierto que todo esto ha ido evolucionando a lo largo de los años. Yo siempre me he dedicado a esta parte de I+D, de innovación. A buscar siempre tratamientos y fórmulas nuevas para diferentes usos”.

"Yo siempre me he dedicado a esta parte de I+D, de innovación. A buscar siempre tratamientos y fórmulas nuevas para diferentes usos”.

Actualmente, la botica está bajo la titularidad de Xavier Marti Mas, y se trata de una de las farmacias referentes en formulación magistral en España, donde se elaboran formulaciones para administración oral y tópica en diferentes formas farmacéuticas, adaptadas a las necesidades del paciente.

A partir del año 1997, la farmacéutica empezó a trabajar en paralelo con el Laboratorio Martiderm, donde ha sido directora técnica y actualmente es la scientific corporate advisor de MartiDerm Group. Igualmente participa como ponente en numerosos cursos de formulación magistral, tanto para dermatólogos como para farmacéuticos. Todo esto ha hecho que “tenga una pierna en la cosmética y la otra en la formación dermatológica”, asegura.

En el marco de la celebración del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, que se celebra el 11 de febrero, la experta ha concedido una entrevista a Pharma Market, en la que nos cuenta su experiencia como formuladora magistral y sus impresiones sobre el futuro de esta especialización.

Recientemente has recibido el Premio Nacional de Formulación Magistral Gedefaf 2023, ¿qué implica este reconocimiento?

El Grupo Español de Dermatólogos y Farmacéuticos Formuladores (Gededaf), está constituido por un conjunto de dermatólogos y farmacéuticos expertos en formulación interesados en afianzar temas relacionados con la formulación magistral dermatológica. Nos vemos una vez al año y uno de los objetivos de esta reunión científica es adquirir conocimiento en avances que en ocasiones se refieren a un nuevo tratamiento para una patología dermatológica o bien alguna forma de administración, alguna forma farmacéutica o la disponibilidad de preparar una fórmula de una u otra manera. Todo esto siempre lo hacemos avalado a través de bibliografía. Como consecuencia de estas reuniones siempre se elige la presentación que ha sido más interesante o que aporta más valor añadido. En esta última edición se acordó que lo que habíamos preparado entre la dermatóloga Lola Bou y yo, era la de más interés. En concreto, se trata de un estudio y desarrollo galénico de una nueva forma farmacéutica indicada en el tratamiento de la alopecia androgénica y el efluvio telógeno.

"En oficinas de farmacia expertas en formulación una de las mayores demandas que hay actualmente es el en el campo pediátrico porque aquí sí hay un déficit"

¿Qué es lo que más se está solicitando en formulación magistral en la actualidad?

En fórmula magistral, a grandes rasgos, se formula mucho para pediatría. En las oficinas de farmacia expertas en este campo una de las mayores demandas en la actualidad es en el campo pediátrico porque aquí sí hay un déficit. Nacen muchos niños prematuros y con insuficiencias en el desarrollo de algunos órganos que necesitan una serie de medicaciones específicas y por ello esta es una necesidad que se cubre mediante la fórmula. En el niño o el bebé se recurre a presentaciones en gota o jarabes, además se formula junto con la leche en la alimentación del prematuro.

"En la farmacia donde yo trabajo, formulamos sobre todo para la alopecia donde hay una gran demanda".

¿Y en dermocosmética?

La cosmética es un campo en continua evolución y crecimiento. Hay una gran variedad de opciones, pero sí que es verdad que cuando quieres ir más allá y deseas hacer algo un poco más activo te encuentras con una serie de ingredientes que están más limitados porque van un paso más allá y necesitan una acción más farmacológica. En la farmacia donde yo trabajo formulamos sobre todo para la alopecia donde hay una gran demanda, también para manchas en la piel y, en general, realizamos bastantes fórmulas de envejecimiento cutáneo.

¿Qué principios activos se suelen usar en este campo?

En el mercado te encuentras actualmente productos con retinol a nivel de formulación, así puedes formular con la forma más activa de la vitamina A que sería su forma ácida, es decir, el ácido retinoico, un ingrediente mucho más potente que tiene la característica de ser un fármaco y por eso no lo puedes encontrar en un cosmético. Mediante una fórmula magistral es posible prescribirlo y asociarlo a otros activos y conseguir fórmulas más eficaces. En el caso de manchas puedes recurrir a fórmulas para asociar hidroquinona, que es lo más empleado en estos tratamientos, con otros activos y seguir con unas formulaciones que van mucho más allá de lo que encuentras comercializado como cosmético.

"En formulación magistral una práctica muy frecuente es realizar tratamientos combinados".

En formulación magistral una práctica muy frecuente es realizar tratamientos combinados. Se puede hacer alguna prescripción con fórmula, de hecho en muchas ocasiones se recurre a esto para tratamientos nocturnos más intensivos, y luego por el día se acompañan de algún cosmético del mercado, de modo que se desarrolla una acción combinada.

¿Percibiste el incremento de alguna patología que necesitara de la formulación magistral en los momentos más álgidos de la pandemia?

Hubo una época, sobre todo al principio de la pandemia, que apreciamos una aumento de una patología dermatológica llamada perniosis, que es parecida a los sabañones. Se trata de un trastorno circulatorio que provoca lesiones en los dedos, especialmente en los de las manos y en los pies. Para abordarla desarrollamos una fórmula combinada que asociaba dos o tres activos, y uno en concreto mejoraba el tema de la circulación. En general, fue bastante bien. Esto es lo único que detectamos desde el punto de vista dermatológico, porque la COVID-19 es principalmente una patología respiratoria.

"Hubo una época, sobre todo, al principio de la pandemia, que apreciamos una aumento de una patología dermatológica llamada perniosis".

¿Cómo ves el futuro de la formulación?

Así como en el pasado había pocas farmacias que formulaban, ahora cada vez son más. Al mismo tiempo, hay que tener en cuenta que desde hace varios años se contempla la formulación por terceros. Eso significa que con la prescripción de un médico puedes ir a cualquier farmacia de España y aunque esta no tenga laboratorio para formular o no disponga de ese activo o carezca del conocimiento necesario para hacerlo, se puede subcontratar a otra farmacia que tenga la capacidad de desarrollarlo. Realmente, se trata de una actividad que es muy propia del farmacéutico, es decir, el hecho de preparar el medicamento. Al final es una especialización. Además, es algo que se ha potenciado, ya que se han creado varios cursos de formación tanto en asociaciones de formuladores como en colegios de farmacéuticos. Esto favorece que el farmacéutico, una vez acabada su formación, su carrera, pueda especializarse y acabar montando un laboratorio en su propia farmacia. En realidad, la fórmula es algo que ha existido siempre, existe y existirá, porque siempre habrá necesidad de recurrir a ella para cosas concretas. Tiene presente, pasado y futuro. No obstante, también hay que tener en cuenta que es una actividad que se encuentra muy regulada y está sujeta a una serie de normas. Además, se hacen inspecciones regulares a todas las farmacias que tienen un laboratorio como formulación.

"Se trata de una actividad que es muy propia del farmacéutico, es decir, el hecho de preparar el medicamento".

De hecho, ¿podría ser una alternativa en caso de desabastecimiento?

Sí, también es un recurso para tener al alcance medicamentos en casos de desabastecimiento. En un momento concreto si un laboratorio deja de producir un determinado medicamento por una rotura de stock o por la falta de suministro de algún ingrediente, si existe la posibilidad de tener este activo en una farmacia y prepararlo en una fórmula, es otra opción más para conseguir esta medicación.

¿Crees que es desconocida por la población general?

No lo sé, pienso que se va conociendo. Yo creo que la fórmula es como un traje a medida porque es un medicamento prescrito para un paciente determinado y una patología concreta. La individualización de los tratamientos está muy de moda, es decir, el que las cosas sean para ti y solo para ti, y esto es un elemento a su favor.

"Yo diría a quienes se quieren dedicar a formular que nunca se queden con la idea de que las cosas como se han hecho de una manera ya se han de quedar igual".

¿Qué es lo más atractivo para ti de formular?

A mí me apasiona lo que hago y pienso que tengo una mente más bien inquieta. Yo diría a quienes se quieren dedicar a formular que nunca se queden con la idea de que las cosas como se han hecho de una manera ya se han de quedar igual. Siempre tienen un porqué. Lo que a lo mejor vale ahora, dentro de cinco años puede que no sirva y por ello siempre hay que dar un paso más: buscar huecos vacíos, lagunas… Desde mi punto de vista, el concepto de fórmula, en cuanto a encontrar lagunas terapéuticas, resulta muy enriquecedor y muy interesante. De hecho, es un concepto que en dermocosmética hemos empleado mucho, buscar siempre algún activo, alguna función, algún uso de un producto que aporte un valor añadido respecto a lo que ya existe en el mercado.