GSK ha organizado un webinario que bajo el título “Por un futuro de narices en la rinosinusitis crónica con poliposis nasal”, habla en profundidad de esta patología. A lo largo del mismo, se ha planteado cómo mejorar la calidad de vida de los pacientes que sufren esta enfermedad inflamatoria.

El acto ha sido en formato de mesa redonda y lo ha moderado Boticaria García, doctora en Farmacia y divulgadora científica y sanitaria. En esta, han han participado el doctor Isam Alobid Alobid, especialista en Otorrinolaringología y coordinador de la Unidad Multidisciplinar de Cirugía de Base de Cráneo en el Hospital Clínic de Barcelona, y el doctor José Miguel Villacampa Aubá, especialista en Otorrinolaringología y Patología Cérvico-facial en la Fundación Jiménez Díaz.

El objetivo del coloquio ha sido destacar la carga sintomatológica de una patología que pasa desapercibida: la rinosinusitis crónica con poliposis nasal, una enfermedad inflamatoria del tracto respiratorio. Así se ha querido apelar al eje central donde se desarrolla esta patología y fomentar la importancia de saber y conocer los síntomas, ya que este es el primer paso para reconocer esta enfermedad.

“Vivir con rinosinusitis crónica con poliposis nasal es como tener un gran catarro constante y no poder respirar nada. A estos pacientes les duele la cabeza, no respiran bien, y tienen una congestión nasal que les limita hasta para hacer deporte, que les dificultad conciliar el sueño y eso impacta en su vida personal, familiar y laboral, ha comentado el doctor José Miguel Villacampa Aubá.

“Vivir con rinosinusitis crónica con poliposis nasal es como tener un gran catarro constante y no poder respirar nada".

Por su parte, el doctor Isam Alobid Alobid, ha añadido que “la poliposis nasal es una enfermedad crónica que está formada por masas o uvas en las dos fosas nasales”, y ahonda en la “necesidad de hablar con el médico de familia, ya que será el link entre el paciente y el otorrinolaringólogo”.

Marián García, conocida como Boticaria García, también se ha involucrado dando difusión a la poliposis nasal, “una enfermedad que a ojos de muchos es desconocida, pero sin embargo puede ser limitante y afectar al día a día de muchísimas personas”.

Los pólipos nasales afectan a pacientes de todo el mundo donde la prevalencia mundial de pólipos nasales oscila entre 0,2% y 4,3%.

La rinosinusitis crónica con poliposis nasal implica exposición frecuente a corticoides orales y, por extensión, a los riesgos asociados a estos. Los pólipos nasales con frecuencia tienen un impacto negativo en la calidad de vida del paciente, en ámbitos tan variados como la salud mental y física, la función social, el sueño e incluso el desempeño laboral (absentismo). La anosmia (pérdida total del olfato) es una queja frecuente que afecta al 65-80% de los pacientes y se considera un marcador de la gravedad de la enfermedad.

Los pólipos nasales afectan a pacientes de todo el mundo donde la prevalencia mundial de pólipos nasales oscila entre 0,2% y 4,3%. Además, hay una marcada predominancia en hombres adultos; la proporción hombres-mujeres oscila entre 2:1 y 4:1. Normalmente aparecen entre los 30 y los 60 años (la edad media en la que aparecen es 42 años).