I+D6 de mayo, 2020
Los pacientes oncohematológicos deben extremar las precauciones en la fase de desescalada

Además, las personas que convivan con estos pacientes deben tomar medidas para proteger al paciente.
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Aunque las autoridades sanitarias ya empiezan a hablar de desescalada en las medidas de confinamiento frente al Covid-19, hay subgrupos de personas como los pacientes hematológicos y, sobre todo, aquellos en tratamiento con quimioterapia o que acaban de recibir un trasplante de médula ósea, que todavía deben tener un cuidado especial frente a un posible contagio por Covid-19 y que, por tanto, deben continuar extremando las medidas de higiene y aislamiento.
“Es fundamental que estos pacientes intenten salir de casa lo menos posible y que reduzcan el contacto en la medida de lo posible con el resto del entorno familiar confinado”, apuntan el doctor Adolfo de la Fuente, jefe del Servicio de Hematología de MD Anderson Cancer Center Madrid, y la doctora Mónica Estévez, coordinadora del Programa de Trasplante Hematopoyético del centro.
Además, incluso dentro del domicilio, también es importante extremar las precauciones. “Los familiares deben restringir el contacto con el paciente, limpiar las zonas comunes frecuentemente y aumentar el lavado de manos”, señalan los doctores, quienes también recomiendan el uso de mascarillas en el contacto diario con estas personas.
Asimismo, es también prudente que el paciente no entre en contacto con la compra del supermercado, la tienda o la farmacia hasta que ésta no se haya desinfectado convenientemente. “Estas medidas van a disminuir notablemente la probabilidad de infección en el hogar”, subrayan. Además, ambos expertos señalan que estas recomendaciones son especialmente importantes si el paciente ha recibido recientemente un trasplante de médula ósea y, especialmente, si se trata de un trasplante de médula ósea alogénico.
En el caso de que el paciente se encuentre en remisión, es decir, sin síntomas ni signos de la enfermedad, las recomendaciones de prevención pueden variar mucho de una persona a otra. “Todo depende del tipo de enfermedad que tuviera, de los tratamientos recibidos y sus efectos secundarios, del tiempo transcurrido desde que se alcanzó esta remisión y de la presencia o no de otras patologías añadidas”, apuntan los doctores de la Fuente y Estévez, quienes recomiendan siempre la consulta con un especialista ante cualquier duda.